The Guardian difunde la historia de "Droncita", la "activista" que pide la renuncia de EPN
"Droncita" es una nueva activista que a través del graffiti protesta contra el Estado mexicano y pide la renuncia de Peña Nieto. ¿Quién está detrás de esta idea?
Ciudad de México, 19 de octubre (SinEmbargo).- El colectivo Rexiste está usando un vehículo aéreo no tripulado, para "vomitar" pintura roja y "desfigurar" la imagen del Presidente Enrique Peña Nieto pintada en graffiti, como una forma de desafiar al Estado mexicano y exigir la renuncia del mandatario nacional tras la desaparición hace más de un año, de los 43 estudiantes de la Normal Rural Isidro Burgos de Ayotzinapa, en Iguala, Guerrero.
El drone bautizado como "Droncita", está anunciado por el propio colectivo como el primer avión no tripulado "artista que pinta graffitis" en México, y es utilizado por los opositores de Peña Nieto para una nueva estrategia en su protesta, "una manera propia y especial de expresar su desdén por el acosado Presidente de México", se lee en un reportaje publicado en el diario británico The Guardian, con el patrocinio económico de la Fundación Bill y Melinda Gates.
"En lugar de salir a las calles, que se cierne sobre ellos. En lugar de bramar sus quejas, los niveles de un bote de spray de pintura vomitan su contenido sobre un retrato de Peña Nieto, hasta que su cabeza se pierde en una mancha de color rojo sangre", se lee en el reportaje firmado por Sam Jones.Cuando las marchas y las protestas no son suficientes, las armas en la lucha contra una "dictadura militar que crece en medio del silencio internacional" son el humor, el ridículo, el arte, y ahora, un robot volador, llamado "Droncita", señala The Guardian.
Imágenes que impactan. Por ejemplo, en otra de las obras del colectivo se adaptó una cita usada por el escritor Antoine de Saint-Exupéry en su obra maestra El Principito, para así destacar la desaparición de los 43 estudiantes de Ayotzinpa. Dice así: "Un día vi el sol 43 veces".
Droncita es la nueva recluta al movimiento de protesta que estalló en el país después de Peña Nieto fue elegido en 2012, y que ha aumentado a raíz de la desaparición sin resolver de 43 estudiantes de Ayotzinapa, dice el reportaje de The Guardian.
"Un día vi el sol 43 veces". Foto: Rexiste
"El caso [de Ayotzinapa] se ha convertido en un símbolo de la cultura de la narco-violencia, la corrupción y la impunidad en un país donde, según la ONU, más de 150 mil personas murieron entre diciembre de 2006 y agosto de este año y en donde también se estima que al menos 26 mil personas han desaparecido desde 2007, muchos como consecuencia de las desapariciones forzadas", señala el rotativo británico."NADIE ME CONTROLA, ES HORA DE CAMBIARLO TODO"
"Nadie me controla, es hora de cambiarlo todo", se lee en la página oficial del colectivo Rexiste en la que presenta y define a "Droncita".
"Nadie me controla, es hora de cambiarlo todo", se lee en la página oficial del colectivo Rexiste en la que presenta y define a "Droncita". Foto: Rexiste
"En este punto de quiebre la única solución es DESENCUARTELAR LA VERDAD para obtener justicia. Ayotzinapa es el inicio de una historia, nuestra historia. Quienes dicen estar de nuestro lado mientras nos asesinan tienen que largarse. Cumplir las exigencias de las familias es lo mínimo. No aceptaremos un no por respuesta", señala el colectivo en un video publicado a finales de septiembre en la plataforma YouTube.En el material de archivo de Droncita se observa al vehículo aéreo no tripulado pulverizar pintura sobre el rostro presidencial, acompañado de una voz en off en el que se dirige tanto al pueblo de México, como a su líder, acusando al Estado y a las fuerzas de seguridad de la participación en la desaparición de los estudiantes.
"Este no es el país que soñaste", se escucha en la grabación. "Pero tu ya sabes eso. Ayotzinapa fue sólo el comienzo de nuestra historia, y de su fin. Ha intentado pedir la verdad en sus cuarteles. Ha intentado engañarnos. Es hora de cambiarlo todo".Rexiste, cuyo nombre es una derivación de las palabras resisten y existen, derivó del movimiento #YoSoy132 que surgió para oponerse a la candidatura de Peña Nieto y denunciar al "gigante" Televisa por tratar de "imponer" en el país el sesgo de su cobertura mediática.
"Hasta la llegada de Droncita, el colectivo era más conocido por entregar un veredicto muy público sobre Ayotzinapa, embadurnando la enorme plaza central de la Ciudad de México, el Zócalo, con 30 litros de pintura y tres enormes, palabras inequívocas: 'Fue el Estado'".A pesar de una afición por los lemas, señala The Guardian, Rexiste está poco dispuesto a etiquetarse a sí mismo.
A pesar de una afición por los lemas, señala The Guardian, Rexiste está poco dispuesto a etiquetarse a sí mismo. Foto: Rexiste
"No somos un colectivo de artistas o activistas", dice el colectivo, que naturalmente, no posee un portavoz. "Operamos en el espacio público, hackeamos el discurso político y hacemos lo que hacemos porque es parte de nuestra vida cotidiana. Existimos porque nos resistimos".Sus armas en la lucha contra una "dictadura militar que crece en medio del silencio internacional" son el humor, el ridículo, el arte, y ahora, un robot volador, indica el rotativo británico.
"'Droncita' solamente nació hace un par de semanas, pero ella ya es profundamente amada y sus videos han sido compartidos a través de las redes sociales", dice el colectivo. "El impacto ha sido sorprendente y creemos que refleja la necesidad de renovar las formas en que nos involucramos en el debate público. Las protestas y las marchas son necesarias, pero no suficientes".El siguiente paso del colectivo es recaudar fondos para pagar por la investigación y el desarrollo, ya que planean compartir los planes de hardware y software para que cualquiera pueda construir su propia versión de "Droncita".
Mientras tanto, su "hermana pequeña" ha ayudado a abrir un nuevo frente en la lucha contra el Estado, dice el reportaje.
"Droncita ha llegado desde el futuro para recordarnos que podemos cambiar todo", dice Rexiste. "Ella nos da otra perspectiva y nos permite vernos a nosotros mismos como somos, incluso si no podemos verlo: tan grandes y tan organizados. El objetivo es la defensa de la vida y de la dignidad. Es una lucha contra el autoritarismo".
domingo, 25 de octubre de 2015
Fwd: The Guardian difunde la historia de "Droncita", la "activista" que pide la renuncia de EPN
lunes, 19 de octubre de 2015
[Red-Ecomunidades] El tiempo que diariamente perdemos en el transporte urbano de la ciudad de México destruye la ecología, el clima, las culturas, la ciudad, la salud, la economía y la política, y hace infernal nuestra existencia.
El tiempo que diariamente perdemos en el transporte urbano de la ciudad de México destruye la ecología, el clima, las culturas, la ciudad, la salud, la economía y la política, y hace infernal nuestra existencia.
Texto discutido en el Conversatorio-desayuno del 1 de octubre de 2015 de la Red en Defensa de la Ciudad de México y ECOMUNIDADES, Red Ecologista Autónoma de la Cuenca de México y sometido a consulta hasta el 14 de octubre de 2015
Hoy en día la gran mayoría de los habitantes de la ciudad de México y de la Cuenca del Valle de México pierden más de 4 horas en el transporte urbano, ya sea en transporte colectivo o en automóvil BMW, Rolls Royce o Cadillac, o sobre las vías del Metro o de trenes suburbanos, o sobre pavimentaciones de Segundo Piso, deprimidos, distribuidores viales, autopistas urbanas, arcos viales, circuitos interiores, periféricos, ejes viales, avenidas y calles. En pocos años perderán irremediablemente más de cinco horas diarias si no hay conciencia entre sus habitantes de la radical alteración urbana que provoca el transporte en todas las ciudades modernas. En cualquier ciudad del mundo, el automóvil, el Metro, el Metrobus, las "vías rápidas", la infraestructura de transporte, inducen un continuo aumento en el tiempo perdido diariamente por los usuarios de todo tipo de transporte. Es inherente al transporte la contraproductividad. El llamado desarrollo urbano" descansa principalmente en el "ordenamiento" urbano que genera el transporte urbano. Las ciudades se hacen a la medida y a las exigencias del automóvil y el transporte colectivo. Los Ángeles, Ca, una ciudad intervenida hace unos 80 años por grandes empresas petroleras y fabricantes de autos, con el fin de crear una ciudad modelo para el uso intensivo del automóvil, tiene ahora más del 60% de su superficie dedicada a los autos y la mayor concentración de vías rápidas en el mundo y es ya una ciudad en la que se pierden más de cuatro horas diarias promedio en el transporte en auto. Un fracaso estruendoso.
Como lo advierten Jean Pierre Dupuy y Jean Robert[1], el transporte disloca el tiempo y el espacio: produce la urbanización que conviene a la economía dominante que sólo beneficia a una minoría. El transporte urbano no solo desplaza personas y carga, sino desplaza también los usos del suelo; no hay manera de frenar este proceso por medio de programas y normatividades urbanas. Como lo señala Arturo Soria y Puig[2], el desarrollo del transporte sirve paradójicamente para acercar puntos y alejar usos del suelo. Dos son las fuerzas que operan para que se verifique ese fenómeno. La primera derivada de las necesidades espaciales del transporte, en especial del automóvil que requiere para su funcionamiento una gran cantidad de espacio que se quita del que necesitan otras actividades humanas, las cuales se ven obligadas a expandirse por el territorio. Al aumentar su velocidad, el auto ocupa más y más superficie de circulación y circulan menos personas. En círculo vicioso, el aumento de las distancias entre las distintas actividades genera más desplazamientos motorizados que acaban reclamando nuevo espacio que devorar.
La segunda fuerza que actúa en la misma dirección es la especialización de los usos del suelo. La practica urbanística conduce a la creación de espacios monofuncionales en los que únicamente se verifica una actividad urbana: grandes áreas comerciales, polígonos de servicios, barrios o colonias dormitorio (por el transporte casi todas los son), áreas de ocio especializado o incluso áreas o zonas de predominio escolar o de salud (ciudades universitarias o de la salud). De esta manera se incrementan las distancias entre los distintos usos; cada vez menos actividades quedan cerca, a distancias fáciles de recorrer andando o en bicicleta. Un resultado significativo de todo este proceso de alejamiento de usos del suelo es el crecimiento de áreas metropolitanas al margen de su evolución demográfica. En Europa, ciudades en franca estabilización demográfica, tienen crecimiento en sus manchas urbanas. Las distancias recorridas han crecido en paralelo a la especialización del uso del suelo, con el consiguiente resultado de una mayor dependencia del motor para realizar actividades cotidianas. Lo más grave de la transformación espacial que impone el transporte urbano y en particular el auto no es tanto las distancias físicas, sino el cambio en las distancias psicológicas y de los comportamientos sociales que acarrea. En los últimos 40 años se produce una sustancial transformación de la autonomía de los niños y los ancianos para desplazarse. En Inglaterra, en los años 70 un 80% de los niños entre 7 y 8 años se desplazaba andando al colegio, en los 90 esta cifra había caído al 9 %. Ahora los adultos, especialmente las mujeres, son choferes de niños y ancianos. Los lejanos hipermercados han sustituido a las tiendas de barrio. Quienes acceden al automóvil tienen que dedicar una parte creciente de su tiempo libre a establecer relaciones de lejanía y sus relaciones interpersonales se reducen significativamente: muere la vida familiar, comunitaria y cultural.
En EU el automóvil cobra cada año cerca de 90,000 vidas humanas, 20% más del equivalente a las víctimas de la guerra de Vietnam; en México cobra más de 20,000 vidas humanas. En México los accidentes de tránsito constituyen la principal causa de muerte no natural y la primera causa de muerte, incluida la natural, en el tramo de edades comprendido entre los 18 y los 25 años y por último, los accidentes de tránsito constituyen la principal causa de minusvalías y discapacidades de la población, probablemente entre el 60 y el 80% de ellas. El uso del auto es responsable principal de la contaminación del aire de la Cuenca del Valle de México y de las decenas de miles de muertes y enfermedades que anualmente se producen en este territorio derivadas de esta actividad.
La economía globalizada profundiza los efectos nocivos del transporte urbano en la urbanización. Desde hace unas dos décadas entramos en la era de la HIPERMOVILIDAD (Mover a México), consigna que en los hechos implica "Vivir para transportarse" y anular las demás actividades del ser humano: familiares, comunitarias, culturales. El uso del auto fomenta los viajes diarios cada día más lejanos y el abandono de los servicios de proximidad, a los que se puede llegar a pie o en bicicleta; fomenta la dependencia de sitios o servicios cada día más lejanos, para acceder a un empleo o a una gestión o a una diversión; impulsa la eliminación de la caminata y el uso de la bicicleta; es el responsable principal del continuo aumento del tiempo perdido diariamente en el transporte urbano; disloca el tiempo y el uso del suelo en el territorio. El auto impone su ley en la ciudad: impone la obligación de utilizar auto a quienes tienen una pequeña posibilidad de hacerlo; impone sus exigencias de espacio, pavimentos, semáforos, policías, servicios, obras, presupuestos en aumento, reglamentos y leyes a modo; impone la injusticia, la impunidad, la falta de respeto a la Ley; por su publicidad y su mercadotecnia impone, además, aspiraciones y simbolismos degradantes: tener un buen auto significa "superarse", tener un mejor trato social, más inteligencia y cultura, poder sobre los demás, mayor atractivo sexual, elegancia, mistificación. El uso del auto crea una mentalidad maligna: El Volante, que se caracteriza por el desprecio por el peatón y el ciclista, por quienes no tienen auto, la incomprensión de los problemas sociales y culturales, la actitud arrogante, agresiva, insolente, autoritaria y el individualismo y falta de interés por el bien común. Desde luego, no todos los automovilistas tienen esta mentalidad y esta actitud, pero, la gran mayoría la tienen porque la maquina degrada su visión del mundo.
No podrán frenarse el continuo aumento del tiempo perdido en el transporte urbano de la ciudad de México y otros problemas derivados del uso excesivo del auto en esta entidad, sin la conciencia social del enorme potencial humano que tiramos a la basura con el tiempo que perdemos diariamente en el transporte urbano; sin la conciencia de que este desastre en la movilidad urbana sólo favorece los vicios y las pulsiones inconfesables de una pequeña minoría y perjudica a la gran mayoría. Mientras nos transportamos no descansamos, no aprendemos, no hacemos ejercicio, no nos divertimos, no ganamos dinero: es el tiempo más miserable de nuestras vidas. El Buen Vivir o la "calidad de vida" se caracterizan por la brevedad del tiempo que dedicamos al transporte urbano. Únicamente la aplicación de severas leyes, reglamentos y la eliminación de superficies publicas dedicadas al estacionamiento o a la circulación de autos, pueden frenar el desastre ecológico, social, económico y político creado por el uso excesivo del automóvil en la ciudad de México. La nueva Ley de Movilidad del DF, promovida inicialmente por nuestro grupo en 2004, degradada por la mentalidad de automovilista que la promovió y la aprobó, recoge muy pobremente los postulados ecologistas que le dieron vida y permanece muy cargada de los muy nocivos conceptos transportistas de la vieja Ley de Vialidad y Transporte, por lo que no representa todavía la legislación local que necesitamos para reducir radicalmente el uso excesivo del auto en la ciudad de México. Sólo con medidas radicales contra el uso del auto podrá frenarse el continuo aumento del tiempo perdido diariamente en el transporte urbano de la ciudad de México.
Red en Defensa de la Ciudad de México, ECOMUNIDADES, Red Ecologista Autónoma de la Cuenca de México, ¡Salir del petróleo! ¡Descrecimiento o colapso!
Adriana Matalonga, Alejandro Domínguez Suberbie, Ángel Pujalte, Eduardo Farah, Edgardo Mota, Miguel Valencia, Rodolfo Buentello.
lunes, 12 de octubre de 2015
Rodolfo Buentello: Día internacional del fracking
sábado, 3 de octubre de 2015
[Ecomunidades] Se podría hasta “aprender chino” durante traslados en transporte en la #CDMX
aprender chinodurante traslados
Viernes 2 de octubre de 2015, p. 37
El incremento del parque vehicular en la ciudad de México, que oscila en 3.5 millones de unidades, ha provocado que la gente invierta un promedio de cuatro horas diarias para trasladarse, estimaron integrantes de la Red en Defensa de la ciudad de México y Ecomunidades.
Dicha cifra es 300 por ciento superior al tiempo que pasaba la gente en el transporte hace 30 años, por lo que sería posible aprender chino o escribir un libro con el tiempo perdido cada año en el automóvil o transporte colectivo
, señalaron.
Las espantosas
condiciones del transporte, sin embargo, hacen además miserable
la existencia de millones de personas, pues las autoridades capitalinas han invertido más recursos en la construcción de vialidades, y aún así la ciudad continúa siendo un gran estacionamiento en las llamadas horas pico
.
Hoy, consideró Miguel Valencia, representante de Ecomunidades, estamos frente a un desastre de la movilidad urbana en la cuenca del valle de México, pues cada año aumenta unos minutos el tiempo diario promedio dedicado al transporte y algunos kilómetros, las distancias recorridas diariamente.
Por lo que a corto plazo, la pérdida de horas-hombre en el transporte, llámese Metro, Metrobús, Trolebús, autobuses o automóviles aumentará a cinco diarias, con un impacto negativo en la calidad de vida de las personas, advirtió.
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ECOMUNIDADES
viernes, 2 de octubre de 2015
¿De veras beneficia a la ciudad de México el Nuevo Aeropuerto Internacional “de la Ciudad de México” que nos impone Peña Nieto, con el apoyo de Miguel Ángel Mancera?
¿De veras beneficia a la ciudad de México el Nuevo Aeropuerto Internacional "de la Ciudad de México" que nos impone Peña Nieto, con el apoyo de Miguel Ángel Mancera?
Se realizan en estos momentos inversiones multimillonarias en la construcción del Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México sin que se hayan convocado audiencias públicas para escuchar las opiniones a favor y en contra de este proyecto, tanto de los habitantes de la ciudad de México y del oriente del estado de México-los principales afectados- como de los estudiosos nacionales e internacionales del daño climático, ecológico, urbanístico, social, económico, político y cultural. ¿De veras necesita la ciudad de México un aeropuerto como el que nos quiere imponer Peña Nieto? El gobierno federal realizó en Ecatepec, en 2014, una falsa consulta pública, casi clandestina, arropada por Eruviel, la SEMARNAT del PVEM y las pésimas disposiciones legales sobre medio ambiente. Mancera no se ha dignado a consultar a los habitantes de la Ciudad de México sobre la conveniencia de construir este Nuevo Aeropuerto que dice ser "de la Ciudad de México ", que busca triplicar o cuadruplicar los vuelos diarios sobre esta ciudad, que incrementa radicalmente el ruido y la contaminación del aire en esta cuenca, que puede provocar la pavimentación de decenas de miles de hectáreas, ser devastador para las aves migratorias que llegan al Lago de Texcoco, impactar el uso del suelo en muchos municipios y demarcaciones, afectar el régimen de aguas de la cuenca y hacer una gran contribución a las emisiones que dañan el clima de la Tierra. Peña y Mancera desprecian el papel que tiene el Lago de Texcoco, como regulador de la temperatura de la Cuenca del Valle de México y en la desertificación en curso en este territorio. De 1987 a 2010 bajó 35% la precipitación pluvial en la ciudad de México y aumentó la irregularidad de las lluvias y la intensidad de las tormentas.
En nombre de la religión de la economía de crecimiento y con base en el culto a la ciencia y la tecnología, Peña Nieto anuncia la construcción de este megaproyecto de megaproyectos que tiene visos de ser un negocio ilícito público-privado y que sólo beneficia a los intereses globalizadores que han llevado a la ruina a la ecología y a la mayor parte de la población mexicana. Se embarca desesperadamente en la construcción de este Nuevo Aeropuerto como en su momento lo hicieron los gobiernos de Grecia o Brasil al construir enormes instalaciones olímpicas sólo para irse a la ruina o a la recesión años después. ¿Por qué construir un aeropuerto mamut en una época en la que desaparece en el mundo el petróleo de bajo costo de extracción, los precios del petróleo pueden dispararse en algunos años y es muy incierto el futuro de la aviación y de la economía mundial? ¿Por qué México, una nación tan vulnerable ecológica y económicamente debe tener el tercer aeropuerto más grande del mundo? ¿Por qué la Ciudad de México, situada en una muy contaminada y sobrepoblada urbanización debe concentrar aun más las operaciones de aviación del país? ¿Por qué rechazan Peña Nieto y Mancera dar información y abrir debates públicos sobre las implicaciones ecológicas, urbanísticas, sociales, culturales, económicas, financieras y políticas de la construcción del Nuevo Aeropuerto Internacional "de la Ciudad de México"? No hay manera de que un proyecto de obra pública sea benéfico para todos si no es discutido públicamente con la mayor amplitud posible en todas sus dimensiones. El gran problema es que tenemos un gobierno del DF y un gobierno federal enajenados por la corrupción que alientan en México los gobiernos desarrollados y sus grandes inversionistas.
Miguel Valencia Mulkay