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domingo, 8 de noviembre de 2015

Un imperativo, la reducción radical de nuestro consumo energético personal, si nos consideramos parte de las clases sociales que tienen un modo de vida moderno; también del consumo energético de las 30 mayores entidades de los países de América Latina, en el menor tiempo posible.

Ponencia presentada en el 3er. Coloquio de Energía, realizado del 2-4 de septiembre de 2015 en la Universidad Autónoma de Chiapas, Tuxtla Gutiérrez, Chiapas.
La transición energética que vivimos magnifica  la incertidumbre económica, la confusión política, los riesgos financieros y los peligros de todo tipo en los países vulnerables, como lo son los países de América Latina ¿Cuál es entonces la mejor opción de estos países frente a la amenaza que representan el agotamiento de los regalos de la Naturaleza, como los hidrocarburos, el carbón, el uranio, etc. y el desastre climático y ambiental producido por seis décadas de desarrollo y muy elevados consumos de energía? ¿Qué hacer ante un parteaguas energético que anuncia el fin de la era del petróleo de bajo costo de extracción y la entrada del gas y petróleo extremo o no convencional que tiene al menos diez veces mayor costo socio ambiental ? ¿Cómo enfrentar las conmociones energéticas, los shocks petroleros, las caídas o elevaciones abruptas en los precios del petróleo o de la economía mundial? ¿Cómo enfrentar el rechazo social a las contaminaciones por la quema de hidrocarburos o por el desplazamiento de pueblos o actividades creado por la introducción de hidroeléctricas, grandes eólicas o solares, o por el encarecimiento de los alimentos básicos en la producción de agrocombustibles, o por la emisión de gases que dañan el clima de la Tierra, o por la construcción o el funcionamiento de centrales nucleares, o por el alza de las tarifas eléctricas o los precios de las gasolinas?   
Responder a estas preguntas exige una visión global del tema energético, no sólo por el lado de la oferta de energía, sino de la demanda de energía que incluya el estudio de factores ecológicos, sociales, históricos, antropológicos, filosóficos, económicos y políticos. Analizar las ligas que tienen entre sí  los colapsos del clima, del agua, de la producción petrolera, de la biodiversidad, de la limpia, de la producción de alimentos, de la sociedad, de la economía, de la política, entre otros; las formas en las que se retroalimentan entre sí estos colapsos mundiales. Hago aquí por lo tanto un planteamiento ecologista, tanto ético como político en defensa de las bases de la vida en la Tierra: Si nos consideramos parte de las clases sociales que en nuestros países tienen un modo de vida moderno, es imperativo reducir radicalmente, en el menor tiempo posible, nuestro consumo energético personal: reducir el uso del auto y del avión. Además, debemos exigir la reducción radical en el consumo de energía de las 30 entidades más importantes de cada país de América Latina: gobierno y grandes empresas e instituciones. Pedir reducciones en el consumo de energía de los pobres en nuestros países es un evidente absurdo.  Sustento este planteamiento en el agotamiento de los regalos de la Naturaleza, en el desastre climático y ambiental global, en el creciente rechazo social a las contaminaciones, en el fracaso del modo de vida de los países desarrollados y en los efectos sicológicos, culturales, económicos y políticos que tiene el consumo de energía después de cierto umbral.   
La era petrolera, muy especialmente las seis décadas de desarrollo( 1950- 2010), se ha caracterizado por el muy rápido crecimiento de la población humana: al menos siete veces desde 1880 a nuestros días; por los genocidios, los ecocidios, la asfixia de la convivencia humana, la miseria de la mayor parte de la población, la concentración del poder en muy pocas manos, el desquiciamiento climático, ambiental, social, económico, político y simbólico; por la degradación de los gobiernos y las instituciones, de los valores y de la cultura; por el muy extendido culto a la ciencia y la tecnología y el predominio de la religión de la economía.  Tal vez la peor consecuencia de la era del petróleo de bajo costo de extracción ha sido la creación del modo de vida de los países desarrollados, muy particularmente del modo de vida de los estadounidenses, el peor modo de vida del mundo, si se toma en cuenta la depredación ecológica y social que imponen al mundo sus excesivos consumos de energía, agua y otras materias primas. Si por motivos de equidad se quisiera generalizar este deplorable modo de vida al resto de la población humana necesitaríamos los recursos naturales de siete planetas Tierra. Sin embargo, el  mayor daño que hace a la sociedad el modo de vida de los países desarrollados consiste en la colonización que hace del imaginario social de los demás países: la mayor parte de los pobres del mundo aspiran a tener un modo de vida igual, por lo que migran a los países desarrollados o hacen todo lo posible por imitarlo en su pueblo o ciudad y abandonan rápidamente sus saberes, sus tradiciones ancladas en la historia, el clima y las condiciones de su región ecológica. La pérdida de la autonomía de los pueblos, ejidos, colonias, barrios y ciudades es la consecuencia de la colonización del imaginario social y la industrialización de la vida de los países no desarrollados.  
Los métodos que hoy se utilizan para producir energía, en su gran mayoría agotan los regalos de la Naturaleza, contaminan el ambiente, destruyen el clima de la Tierra y atentan contra la existencia de las culturas del mundo, el tejido social y el equilibrio de la persona humana. No existen formas industriales de producir energía que sean aceptables desde el punto de vista del mediano y largo plazo,  de la ecología y de la Paz o la no violencia.  Al ritmo actual de su utilización, el carbón, el petróleo, el gas natural, el uranio, accesibles, se consumirán dentro del horizonte temporal de dos a tres décadas. El auge de la extracción de gas y petróleo no convencional; es decir: del gas y petróleo shale y de aguas profundas, de muy alto costo de extracción y excesivo impacto climático, ambiental y social, confirma rotundamente que el gas y el petróleo convencional-de bajo costo de extracción y mucho menor impacto ambiental- se agota rápidamente en el mundo y crea así, una muy riesgosa situación política, económica y energética para los próximos años, especialmente para los muy vulnerables países de América Latina: incertidumbre, shocks petroleros, recesiones económicas, como los que empezamos a sufrir con mayor frecuencia. Se trata de un hecho geológico mundial de consecuencias trascendentales.  
Termina la era del gas y petróleo de bajo costo de extracción y de menor impacto social y ambiental. Comienza la era del gas y petróleo extremo o no convencional cuya extracción implica un intolerable aumento en la depredación climática- la producción de metano es muy elevada con la tecnología del fracking – y la ambiental es muy superior a la del gas y petróleo de bajo costo de extracción, por el enorme consumo de agua y el uso de sustancias químicas cancerígenas o muy venenosas. Los derrames de petróleo en aguas profundas tienen impactos excesivos, inaceptables bajo cualquier criterio ecológico.  No hay justificación alguna para la introducción de estas tecnologías. La extracción de petróleo a partir de arenas bituminosas en Canadá, o por medio de la tecnología del fracking en EU, o los proyectos de extracción en zonas de alta vulnerabilidad ecológica, como el Ártico, la selva amazónica, las costas de California, así como el repunte en la construcción de nuevas centrales nucleares, la producción de agrocombustibles a partir de caña de azúcar, maíz y otras plantas y el auge en la construcción de grandes eólicas y solares, confirman también el agotamiento del petróleo convencional y la entrada de la era del Petróleo Extremo o petróleo de alto riesgo ecológico y económico.
La economía mundial crece con mayor dificultad desde el momento en que comienza la caída en las reservas del petróleo barato, convencional, anunciada desde hace décadas. En México este agotamiento fue advertido hace algunos lustros por muchas voces, pero, fue negado rotundamente por el Estado; ahora es  ya evidente, pero el gobierno federal y el Estado aun niegan en su “reforma energética” el reconocimiento de las consecuencias económicas, ecológicas, políticas y sociales que tiene este hecho.  Estos límites geológicos que descubre ahora la extracción de combustibles fósiles debería ser razón suficiente para adoptar un cambio radical en la extracción de gas y petróleo en los países de América Latina: hasta el momento su dependencia de los combustibles fósiles es demasiado alta y por lo mismo demasiado riesgosa. Rechazar la extracción de gas y petróleo no convencional, dejar el gas y el petróleo shale en el subsuelo y el carbón en el hoyo, es la mejor apuesta que pueden hacer los países de América Latina. Aceptar la dureza de esta apuesta puede ahorrar muchos sufrimientos al país.
La producción de electricidad basada en combustibles fósiles es un factor central en la emergencia  del desastre climático y el desastre ecológico de los diversos territorios del mundo; las protestas de las comunidades cercanas a las plantas de generación de electricidad por medio de carbón o productos del petróleo se dan crecientemente en muchos países del mundo, desde Chicago hasta Durban, en Sudáfrica debido a los daños que producen en la salud de los vecinos, la flora y la fauna. Hace algunos días, miles de personas ocuparon el sitio Garzweiler, cerca del río Rin, en Alemania, donde se realiza la más grande explotación de carbón a tajo abierto del mundo  y suspendieron las operaciones un fin de semana al grito de “Fin a las emisiones de CO2” “Ende Gelande”(¡Hasta aquí y no más lejos!). En las últimas cumbres del clima arrecian las protestas de las organizaciones indígenas, campesinas, sindicales, urbanas, ecologistas, de derechos humanos que participan en los foros paralelos a las cumbres del clima de la Tierra, las COP o conferencias de las partes. En la cumbre del clima de Copenhague en 2009, más de 150,000 personas provenientes de muchos países, en su mayor parte europeos, marcharon al grito de “Cambiemos el sistema no el clima”. Las organizaciones sociales del mundo preparan ahora muy diversos y masivos actos de desobediencia civil hacia la mega cumbre del clima en París, la COP-21. Lamentablemente, es muy poco lo que puede esperarse de la COP-21 de Paris y de cualquier cumbre climática. Los gobiernos son parte del problema climático, energético, ambiental del mundo.
En su gran mayoría, los científicos del mundo reconocen inequívocamente el calentamiento del sistema climático de la Tierra y de acuerdo con el Quinto Informe de Evaluación del  IPCC o Grupo Intergubernamental de Expertos sobre Cambio Climático, aprobado en 2013, nos dicen “ Desde la década de 1950 muchos de los cambios observados no han tenido precedente en los últimos milenios” “Cada uno de los tres últimos decenios ha sido sucesivamente más cálido en la superficie de la Tierra  que cualquier decenio anterior desde 1850” “la principal contribución al cambio climático proviene del aumento en la concentración de CO2 en la atmósfera que se viene produciendo desde 1750” “Es sumamente probable que la influencia humana haya sido la causa dominante del  calentamiento observado desde mediados del Siglo XX” “Es probable que para fines del siglo XXI la temperatura global en superficie sea superior a 2 grados” … en varios escenarios. No obstante, varios grupos de científicos de países desarrollados no son tan conservadores como el muy hostigado IPCC y pronostican 4 y hasta 6 grados de aumento de la temperatura en este siglo, lo que provocaría catástrofes inenarrables. La reducción radical de emisiones que dañan el clima es un asunto  extrema urgencia en todo el mundo.  
El despilfarro energético es muy evidente en los países que se llaman a sí mismos “desarrollados”: en sus sistemas urbanos e industriales, hay un gran fracaso energético, como lo es el transporte cotidiano que consume no sólo hasta cuatro horas diarias de la gran mayoría de los trabajadores, sino ingentes cantidades de electricidad y gasolinas. La velocidad promedio en la ciudad de México no excede en la mayor parte día a los 12 km por hora; la bicicleta hace mejores tiempos y ahorra muchas muertes y energía. Se mueve absurdamente a las personas y a las cosas.  El bombeo de agua muestra también una gran irracionalidad en estos países, pues se aceptan excesivos consumos de agua, especialmente en la industria, como la de alimentos y los servicios, como los campos de golf. Se desperdician, debido a la producción industrial, más del 35 % de los alimentos. La agroindustria moderna es otra gran fuente de despilfarro  energético, tanto en bombeo de agua, como en el uso de fertilizantes, pesticidas y transportes. En la construcción de vivienda también hay un enorme despilfarro energético inherente a su producción industrial. Las llamadas economías de escala funcionan en contra de las economías ecológicas y energéticas: son insostenibles. Los países de América Latina adoptan habitualmente las peores tecnologías de los países poderosos, por lo que su despilfarro energético a veces supera al de estos países.  Existe en América Latina un gran potencial de reducción en el consumo de energía debido a las grandes desigualdades sociales.
Ciertamente es una buena noticia encontrar señales en el horizonte que revelan no sólo el final de la época petrolera, sino el final de la era del desarrollo iniciada después de la Segunda Guerra Mundial. Espero que también termine pronto la sociedad de crecimiento que tanto daño hace a la humanidad y a los seres vivos no humanos. La era petrolera, muy especialmente las seis décadas de desarrollo( 1950- 2010), se caracterizan por el uso irracional del transporte, en especial por  el uso abusivo del auto, el avión y los trenes rápidos; por el uso irracional de fertilizantes, pesticidas, maquinaria  y tecnologías altamente depredadoras para producir alimentos; por el irracional bombeo, mal uso y contaminación del agua; por la producción desmedida de residuos sólidos, tóxicos, peligrosos, por las descargas de aguas envenenadas en ríos, lagos, mares, por la emisión descomunal de gases que dañan el clima de la Tierra; por el  uso excesivo del aire acondicionado, la calefacción, la iluminación; por el consumo excesivo de energía de sectores privilegiados de la sociedad, como lo son la industria y los servicios; por el auge de las falsas soluciones al problema del agotamiento de los dones de la Naturaleza, como el fracking, extracción en aguas profundas, energía nuclear, agrocombustibles, biomasa, grandes eólicas y solares; por la creciente falta de ética de científicos, técnicos, expertos; por el predominio de la tecnocracia y la muerte de la democracia; por el predominio de una escolarización, unas televisoras y un consumo de tecnologías que colonizan profundamente el imaginario social y promueven el consumismo más degradante posible y la mercantilización de todo lo habido y por haber, la omnimercantilización de la vida.  
A mayor consumo de energía per cápita, mayor violencia social y mayor destrucción ecológica; mayor angustia, stress y destrucción del tejido social.  La especie humana puede desaparecer toda o en su mayor parte debido al excesivo consumo de energía y al consumo de carbón y petróleo. Los altos consumos de energía tienen efectos sicológicos y sociales devastadores: destruyen la convivencia humana, la autonomía de las personas y las comunidades, la equidad en la participación del poder y la soberanía de los países empobrecidos por la economía moderna globalizada. El consumo de energía, después de cierto umbral, corrompe al cuerpo social y degrada a la persona humana. Tolerar la contaminación de los suelos, los subsuelos, los ríos, los lagos, los mares, la atmosfera implica colonización de la mente por ideas económicas impuestas por quienes viven en la miseria moral; implica un suicidio colectivo. Reitero Si nos consideramos parte de las clases sociales que en nuestros países tienen un modo de vida moderno, es imperativo reducir radicalmente, en el menor tiempo posible, nuestro consumo energético personal: reducir el uso del auto y del avión. Además, debemos exigir la reducción radical en el consumo de energía de las 30 entidades más importantes de cada país de América Latina: gobierno y grandes empresas e instituciones. Pedir reducciones en el consumo de energía de los pobres en nuestros países es un evidente absurdo.  
Miguel Valencia Mulkay
ECOMUNIDADES
Red Ecologista Autónoma de la Cuenca de México





martes, 3 de noviembre de 2015

Fundamental, la reducción radical del consumo de los países desarrollados y de las clases altas de los demás países, para poder recuperar a las comunidades campesinas y la buena alimentación. #decrecimiento

Fundamental, la reducción radical del consumo de los países desarrollados y de las clases altas de los demás países, para recuperar  el vigor de las comunidades campesinas y la buena alimentación.  

Fragmento de la conferencia sobre descrecimiento presentada el 16 de octubre de 2015 en la licenciatura en Nutrición de la Universidad Autónoma de Querétaro. Por el Día Mundial de la Alimentación2015.

El exceso en el consumo funciona como una droga en razón no de la calidad de los productos que se consumen, sino de su cantidad. Invadidos por los objetos, los habitantes del mundo desarrollado poseen en promedio 10,000 de ellos contra los 236 que tienen los indios navajos. En los grandes supermercados están disponibles para su compra más de 10,000 artículos. Es así que Wal-Mart, con sus más de 8,000 tiendas, sus más de 300 mil millones de dólares de venta anual y sus 1.3 millones de empleados (en Estados Unidos, con salarios medios inferiores al umbral de pobreza), se convierte en la primera empresa mundial. Los más de 3,000 mensajes publicitarios cotidianos  que reciben los habitantes de los países desarrollados están hechos para impulsarlos a comprar lo que sea. Los consumidores de esos países tiran a la basura cantidades increíbles de productos en todos los estadios del ciclo, desde los rechazos de la gran distribución hasta los desechos domésticos. En Italia, 15% de la comida y 10% del pan y las pastas acaban en el basurero, lo que representa para el pan tirar 1600 toneladas por día o 6 millones de toneladas al año y 2 millones de toneladas para las pastas (datos de 2005, The Guardian). Una encuesta realizada en Inglaterra sobre la totalidad de la cadena alimentaria, del productor al consumidor pasando por la distribución, concluye que la tercera parte de los alimentos producidos, distribuidos y comprados en el Reino Unido terminan en el basurero (The Guardian, 2005).

Aún si llegamos al extremo de considerar que el consumo medio de alimentos de los países desarrollados y de las clases altas y medias de los países emergentes no tiene nada de excesivo, la reducción del consumo de esos países y estas clases sociales es un imperativo ético, tanto por razones de justicia social que de justicia ecológica y climática. La reducción de la bulimia individual no puede sino arrastrar la reducción de la obesidad colectiva y por lo mismo de la huella ecológica. Los grandes consumos individuales degradan a la sociedad en su conjunto: imponen un imaginario social que destruye los valores climáticos y ambientales.  Comer menos cárnicos- sabiendo que son necesarias entre 8 y 10 calorías vegetales para producir una caloría animal -y transportarse menos corresponde a la regla gandhiana: vivir simplemente para que los  demás puedan simplemente vivir. El desperdicio de alimentos es inherente a la forma de producción y consumo de la era moderna; es consustancial a la sociedad industrial cuya economía de crecimiento produce la miseria y la riqueza insultante que nos agobian. El evangelio productivista de los banqueros podría resumirse así: "Haceos la vida imposible los unos a los otros hasta que se extinga la especie humana". Según Serge Latouche "cada 10 segundos pasa un camión de Francia a España por los Pirineos y se espera que antes de 15 años sea un camión de cada cinco segundos", y nos dice "La globalización lleva al paroxismo esta lógica de la masacre social y ecológica. En Europa, desde hace algunos años los bienes de consumo tienen incorporados más de 6,000 km de transporte; los alimentos  de cualquier comida han viajado al menos 2,500 km antes de llegar a los labios del consumidor. Se calculó hace algunos años (Wuppertal Institut, 1993) que un yogurt de fresa vendido en Stuttgart había recorrido 9,115 km si se toma en cuenta el viaje de la leche, el de las fresas cultivadas en Polonia, el del aluminio de la etiqueta, la distancia de la distribución, etc. Los absurdos de la economía globalizada son legión. Hace unos 10 años los británicos importaban 61,400 toneladas de pollo provenientes de los Países Bajos mientras exportaban 33,100 toneladas de pollo a los mismos Países Bajos".

"El cálculo en términos de kilómetros-alimento, medida que encapsula la distancia entre el bieldo y el tenedor, ofrece resultados asombrosos. El carnero congelado de Nueva Zelanda viaja casi 19,000 km por avión refrigerado para llegar a la Gran Bretaña. Las lechugas de California llegan a las escaleras de Washington después de 5,000 km de viaje consumiendo 36 veces más petróleo del que contiene en calorías, mientras las lechugas que llegan finalmente a Londres han consumido 127 veces más de energía de la que contienen y este volumen de perecederos que atraviesan los mares crece a 4% al año. El kétchup que termina en las mesas de los suecos recorre una odisea de 52 etapas de transformaciones y transportes. Todo esto se prestaría a la risa si nuestros pulmones, nuestra salud, la existencia de las generaciones futuras y la supervivencia del planeta no pagaran la factura  de semejante locura económica"[1].  No solamente los transportes agotan rápidamente el petróleo, un regalo de la naturaleza no renovable, sino que emiten gases tóxicos como el monóxido de carbono,  gases de efecto de invernadero como el CO2 que provocan el desastre climático que padecemos y metales pesados cancerígenos como el plomo y el cadmio.

Una reducción radical en el uso de los transportes es absolutamente necesaria para frenar la rápida muerte de especies vegetales y animales, detener los colapsos ecológico y climático mundiales y recomponer las comunidades campesinas. La desconexión del gran mercado mundial se vuelve imperativa: el libre comercio se convierte en la fuerza principal de creación de miseria y devastación climática y ecológica del mundo.  La comida local se impone para recomponer los desastres creados por el libre comercio y la sociedad de crecimiento. No obstante, se programa exactamente lo contrario. Se prevé un aumento considerable del trafico transfronterizo en los años que vienen. Todos los planes a nivel mundial y en México parten del desarrollo de infraestructuras de transporte: puertos, aeropuertos, carreteras, supercarreteras, túneles, puentes,  más grandes y más numerosos. En México, el poco conocido proyecto Megalópolis de Peña Nieto considera diversos megaproyectos de transporte en la región centro de México, en los estados de México, Morelos, Puebla, Tlaxcala, Hidalgo y Querétaro: la construcción del tercer aeropuerto más grande del mundo sobre el Lago de Texcoco, el tren de alta velocidad México-Toluca, el tren de alta velocidad México-Querétaro y la ampliación y construcción de diversas supercarreteras, arcos, autopistas urbanas, segundos pisos, distribuidores viales.

Está por aprobarse, también, el nuevo tratado de libre comercio llamado Acuerdo Transpacífico, ATP, en el que participa el gobierno mexicano y que trata no solo de eliminar todas las barreras al comercio internacional, sino también las leyes que garantizan la calidad y sanidad de los alimentos, la protección de la agricultura y la privacidad de la información de los ciudadanos, privilegiando la agenda corporativa. Organizaciones de defensa del consumidor con sede en Estados Unidos, como Public Citizen señalan que con el ATP podrían crearse un tribunal secreto en el que las empresas demandarán a los gobiernos ante paneles de arbitraje integrados por abogados corporativos que eviten los tribunales nacionales y que anulen las decisiones de los parlamentos en caso de no ser favorecidos por éstos.  Acompañan a los tratados de libre comercio, acuerdos que dan ventajas a los productores internacionales sobre los productores locales lo que impone tecnologías internacionales de alto riesgo e impacto socio ambiental, como son los monocultivos o "desiertos verdes" que funcionan por el uso intensivo de fertilizantes y de pesticidas como el famoso Roundup de Monsanto al que se le atribuyen grandes riesgos para la salud humana y muy ligados a ello, la introducción de semillas genéticamente modificadas o transgénicas. Se radicaliza así la sobrexplotación de los suelos, la eliminación del pequeño productor y la muerte de las comunidades campesinas. El consumo excesivo de energía, alimentos y otras materias primas, característico del modo de vida de los países desarrollados y de las clases altas y medias de los países emergentes, está en el origen del desastre climático, ecológico, social, económico, político y simbólico del mundo.  Por el bien de todos, debe eliminarse el consumo excesivo, conspicuo, que impulsan los países desarrollados, especialmente Estados Unidos, y las clases altas y medias de los demás países.

Miguel Valencia

¡Descrecimiento o colapso!



[1] La Pari de la decroissance, Serge Latouche, Fayard, 2006

domingo, 1 de noviembre de 2015

Very unusual consensus on postdevelopment -- Un insólito consenso de la Sociedad Civil de México y América Central rumbo a la COP21 de París

Very unusual consensus on postdevelopment,

Very unusual consensus on postdevelopment was achieved in the Workshop towards COP21, sponsored by European Union Delegation in Mexico, held in Mexico Cy 7-9 oct 2015.

Representatives of NGOs from Central America and México propose actions towards the creation of a Post  Development Society.

  • Eliminate the GDP, Gross Domestic Product paradigm and the idea of infinite growth
  • Renegotiate free trade agreements, with the intention to cancel them and change them to just comerce agreements.
  • Propel global degrowth by means of frugal life, with social responsability, environmental justice and gender equality.
  • Foster South-South colaboration
  • Cancel Latin american external debt
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Un insólito consenso de la Sociedad Civil de México y América Central rumbo a la COP21 de París.   

Un insólito consenso se consigue en el taller Sociedad Civil de México y América Central Rumbo a la COP21, celebrado en la ciudad de México entre el 7 y el 9 de octubre y auspiciado por la Delegación de la Unión Europea en México.

Ambientalistas y representantes de organizaciones de América Central y  México proponen realizar acciones en favor de la creación de una sociedad Post Desarrollo:
  •  Suprimir el paradigma del Producto Interno Bruto, PIB y la idea del crecimiento infinito.
  • Renegociar los tratados de libre comercio, con miras a anularlos y cambiarlos por tratados de comercio justo.
  • Impulsar el descrecimiento global, por medio de la vida frugal, con responsabilidad social, justicia ambiental e igualdad de genero.
  • Fomentar la colaboración Sur-Sur.
  •  Anular la deuda externa de América Latina,

entre otros consensos que daremos a conocer en los próximos días.

lunes, 10 de noviembre de 2014

¡INTOLERABLE, EL COTIDIANO TSUNAMI DE BASURA, RESIDUOS, DESECHOS EN LA CIUDAD DE MÉXICO!

Texto presentado a debate  en el desayuno de la Red en Defensa de la Ciudad de México del 6 de agosto de 2014 y sometido a consulta en octubre de 2014.
El tsunami cotidiano de la basura, residuos, desechos de la ciudad de México implica la dispersión, en esta ciudad y su cercanía, de cada vez más cientos de miles de toneladas al año de plásticos, papeles y cartoncillos, metales, químicos tóxicos y persistentes, y otros materiales y substancias contaminantes; implica el rápido envenenamiento de los acuíferos, los suelos y el agua superficial, así como la contaminación del aire en esta nuestra casa ecológica, la Cuenca del Valle de México, en cuencas cercanas y la contaminación de lejanos ríos y mares; implica una creciente tasa de enfermedad y muerte en este y otros territorios y una tendencia  que se acelera y se vuelve catastrófica. Contribuye a las grandes concentraciones de plásticos que flotan en los océanos. La producción de desechos crece de manera exponencial, superior al crecimiento de la economía. Esta inundación de basura agobia nuestras mentes, degrada nuestros días, aniquila la convivencia, destruye el tejido social,  amenaza la salud y la supervivencia de esta ciudad y las futuras generaciones: mata el futuro. Únicamente, las caídas de la economía y la elevación de las tarifas de gas, gasolina y electricidad frenan un poco esta tendencia, no obstante, las nuevas tecnologías que impulsan el consumo de productos industriales y el crecimiento económico aceleran este proceso destructivo. Las autoridades del DF ocultan la gravedad de esta erupción de basura y pretenden resolverla con la introducción de nuevas tecnologías, procesos e infraestructuras engañosas que crean mayores problemas y sólo difieren la solución del problema.  Se trata de una “catástrofe controlada” que acumula tensión y puede explotar en cualquier momento. Es urgente informar y alertar a los vecinos de cada colonia, pueblo o ejido de lo que realmente sucede con la basura, los residuos y los desechos en esta ciudad y en el mundo.    
El sistema de limpia de la ciudad de México, por otra parte,  es  una de las causas concretas principales del origen del tsunami  cotidiano de basura, residuos, desechos en este territorio. La recolección y transferencia de basura, los rellenos sanitarios, la incineración de basura o residuos, los confinamientos de residuos tóxicos o peligrosos, son elementos de este sistema perverso que disloca el problema, lo oculta, y  ayuda a sostener este tsunami  cotidiano debido a que alienta a los vecinos a consumir más productos industriales altamente dañinos para la salud y el Medio Ambiente y a producir más basura, residuos y desechos. Este sistema de limpia del DF ayuda a  conservar los malos hábitos de los vecinos en los asuntos de la basura y la irresponsabilidad de la industria, a destruir  los valores ambientales y fomentar la irresponsabilidad y mala conducta de los ciudadanos y fortalecer los grandes negocios sucios de las empresas transnacionales y las autoridades. La basura, los residuos y los desechos de la ciudad de México viajan cada vez más lejos, consumen cada vez más gas, gasolina y electricidad, contaminan cada vez más suelos, subsuelos y acuíferos, oprimen, devastan cada vez más pueblos, ejidos y municipios fuera de la ciudad, enfrentan cada vez más oposición de estas comunidades. Se disloca cada vez más el problema  de la basura; cíclicamente, este sistema de limpia sufre crisis que cada vez se vuelven más dañinas: el colapso del sistema es muy previsible debido a su gran incoherencia. Los vecinos de las colonias, pueblos y ejidos de esta ciudad deben conocer esta peligrosa situación y tomar partido contra este aberrante sistema de limpia. En algún momento futuro podemos ahogarnos en basura en casa o en nuestra calle, colonia, pueblo o ejido debido a un colapso repentino del sistema de limpia de la ciudad de México.     
Por el enorme daño que produce, por los grandes riesgos que entraña y  para recuperar la serenidad y  el buen juicio de los vecinos, frenar un poco la devastación ambiental y el disparo en las enfermedades y las muertes ocasionadas por ella, este calamitoso sistema de limpia debe desaparecer a la brevedad posible. Sin embargo, no podemos resistir, oponernos y demoler este corrupto sistema de limpia sin conocer a fondo los apoyos, resortes o soportes profundos que tiene, como son: la mercadotecnia y la publicidad de empresas transnacionales, la capacidad de estas empresas para bloquear cualquier legislación, reglamento o norma de residuos y desechos que frene sus actividades industriales; la corrupción de las escuelas y universidades que no sólo permiten la venta de los productos de estas empresas en sus planteles, sino que promueven en sus aulas las doctrinas del consumismo y valores e ideas de “éxito”, “superación”, “competitividad” “progreso”, “desarrollo”, “modernidad”,” crecimiento económico”, que sirven de soporte simbólico al consumo de estos productos industriales que producen tanta basura y desechos y que dañan severamente la salud y el Medio Ambiente; los padres y familiares de niños que fueron “educados” de la misma manera y que han sufrido por muchos años el bombardeo publicitario de las televisoras y radiodifusoras comerciales; los intereses políticos y económicos de políticos, empresarios, “expertos”, profesionistas y líderes sindicales  ligados a la gestión de la basura, los residuos y los desechos. La economía de crecimiento y el culto a la ciencia y la tecnología son en el fondo las fuerzas que  impulsan esta tendencia catastrófica en México.
No es posible conservar la calma, la serenidad, la tranquilidad ante la erupción de basura, residuos, desechos en la ciudad de México; ante la apatía, indiferencia, indolencia, insensatez, irresponsabilidad de científicos, académicos, profesores, profesionistas, “expertos”, ambientalistas, funcionarios públicos, legisladores, jueces, magistrados, banqueros, empresarios que ocultan, minimizan, encubren, enmascaran la ruina, violencia, devastación, vicio, muerte, enfermedad, perversión, desquiciamiento, genocidio, ecocidio que produce esta erupción. No tiene futuro esta ciudad y este país si no REDUCIMOS RADICALMENTE LA PRODUCCIÓN DE BASURA, RESIDUOS Y DESECHOS; si continúan en operación las grandes facilidades que ofrecen los gobiernos a los vecinos de las colonias, barrios, pueblos, ejidos, para que se deshagan de la basura, los residuos, los desechos. Por otra parte, no podemos esperar soluciones adecuadas a este predicamento de parte de los gobiernos, las universidades y los empresarios que están básicamente comprometidos con las ideas y los intereses económicos que impulsan este ominoso tsunami. La solución a esta calamidad solo puede venir de los ciudadanos comunes, de sus organizaciones en la base social: grupos y asociaciones vecinales.    
Alternativas vecinales
  • Buscar y difundir información alternativa sobre la basura, los residuos, los desechos: de personas o entidades autónomas, independientes, alejadas de los gobiernos,  de los bancos y fundaciones internacionales, de  las empresas transnacionales, de los consejos universitarios. Leer el Convenio de Estocolmo sobre Contaminantes Orgánicos Persistentes;  Conocer las opiniones de toxicólogos internacionales, como: los doctores Dominique Belpomme y Jean Francois Narbonne; el trabajo de organizaciones o redes como: Algalita.org; Eco-Emballages; The Ecologist; Ecologistas en acción; Ecoportal, Culture Change, Union of Concerned Scientists; Zero Waste International Alliance; No-Burn; Red de Acción sobre Plaguicidas y Alternativas en México, RAPAM; Degrowth; Decroissance; Decrecimiento; Descrecimiento  y muchas otros. El trabajo de activistas mexicanos como: Jorge Tadeo Vargas;  Fernando Bejarano; Carlos Padilla Massieu. Es obligada la lectura del estudio Composición y generación de residuos solidos urbanos de la Ciudad de México durante 2008-2009, elaborado por María Teresa Orta Ledesma de Velásquez, Gerardo Saucedo Castañeda y el Dr. Luis Raúl Tovar Gálvez, publicado por la Universidad Autónoma Metropolitana.
  • Meditar individualmente y reflexionar colectivamente (seminarios, talleres, reuniones vecinales) sobre el predicamento que entraña la basura, sus lixiviados, los sumideros, los residuos nucleares, nanotecnológicos, genéticos, químicos; los desechos de convertidores catalíticos, transformadores, pilas, llantas;  la obesidad, la diabetes, el cáncer, las malformaciones genéticas, provocadas por el consumismo; la muerte de los acuíferos, los humedales, los arroyos, las lagunas, los lagos, los ríos, provocada por la basura y los residuos; el ambiente envenenado en el que vivimos.
  • Aceptar que necesitamos crear otra visión del mundo, un nuevo sentido común, una nueva cultura basada en la sobriedad, respeto a nosotros mismos, a los demás seres vivos humanos y no humanos y a los bienes comunes, como son el agua, el aire, los suelos. Reconocer el desquiciamiento ambiental, social, económico, político, simbólico, del mundo moderno, desarrollado, consumista y la necesidad urgente de reducir radicalmente los consumos de quienes más tienen: los países desarrollados, las clases medias y altas, responsables principales de este desquiciamiento; convencernos de la necesidad de reutilizar, reparar, reciclar, refrenar, con el fin de mejorar la salud, el bienestar y recuperar la alegría de vivir. Se impone la reducción en el consumo de productos tóxicos, como los alimentos industrializados; se impone un cambio de modo de vida que implique la sobriedad, menor “huella ecológica”, menos consumo, menos trabajo, descrecimiento.
  • Aceptar que es urgente exigir al gobierno la reducción radical de los gastos en publicidad y mercadotecnia( actividades que lindan con la delincuencia) : prohibir la publicidad de muchos productos (comida chatarra, autos, carnes, turismo) y en muchos lugares(televisión, radio, estadios, foros, cines, vía pública, escuelas, universidades); prohibir el uso del plástico en bolsas y otros productos de gran consumo; prohibir los envases desechables, los empaques de fantasía ; prohibir la venta de comida chatarra en las escuelas y universidades; restringir severamente  el funcionamiento de tiendas tipo Wal Mart (difundir fotos de La Gente de Wal Mart que están en internet) y franquicias tipo OXXO; reducción radical de la importación de alimentos con transgénicos OGM o con gran contenido de transporte; reducir el escandaloso desperdicio de alimentos de la clases media y alta( la tercera parte de los alimentos producidos acaban en el basurero); Desalentar el Libre Comercio, la urbanización y la agricultura productivista.
  • Adoptar las siguientes consignas políticas vecinales:
    ¡No la venta de pilas, plásticos, insecticidas químicos! No a los incineradores de cualquier tipo! ¡No al transporte de residuos tóxicos o peligrosos! ¡No a los rellenos sanitarios! ¡No a los centros de transferencia de basura! ¡No a la recolección y transferencia de basura! ¡No a los confinamientos de residuos tóxicos o peligrosos! ¡No a la instalación de centrales nucleares o de pozos de fractura hidráulica (fracking) o de minería a tajo abierto! ¡No al uso de pesticidas o fertilizantes químicos! Los gobiernos deben aplicar una política de Relocalización de la gestión de la basura, los residuos, los desechos; es decir: obligar a la separación de los residuos al momento que se producen, en el lugar donde se producen (en la fuente); obligar a acopiar y tratar los residuos tóxicos o peligrosos en el mismo lugar donde se producen; obligar a acopiar los residuos secos, inorgánicos o industriales y tratar los residuos húmedos u orgánicos en la cercanía donde se producen: en la misma comunidad territorial: pueblos colonia, ejido. Eliminar la deslocalización de la basura; es decir: la recolección y transferencia de basura;  cierre o clausura de los centros de transferencia de basura, rellenos sanitarios, incineradores, por medio de la creación de empresas y/o cooperativas vecinales que operen centros de acopio y tratamiento de residuos en cada pueblo, gran colonia o ejido, y por medio de acuerdos regionales con la industria y las organizaciones campesinas, realizar la recolección oportuna de residuos acumulados en estos centros de acopio y tratamiento de residuos locales. Los residuos húmedos (orgánicos) deben ser tratados en el centro de acopio local, para ser enviados principalmente al campo,  como fertilizante. Prohibir el traslado en la vía pública de basura, residuos tóxicos o peligrosos; prohibir la operación o instalación de incineradores de basura, residuos o desechos de cualquier tipo, confinamientos de residuos tóxicos o peligrosos, rellenos sanitarios, centros de transferencia de basura. Establecer un cargo por el acopio y tratamiento local de residuos que permita operar a la empresa o cooperativa local.
  • Adoptar las siguientes consignas políticas vecinales de apoyo:
    ¡No a la publicidad exterior! ¡No a los envases desechables! ¡No al agua embotellada! ¡No a las bolsas de plástico! ¡No a la venta de comida chatarra en las escuelas y universidades! ¡No a las tiendas Wal Mart y las franquicias OXXO! ¡No al desperdicio de los alimentos! ¡No a los alimentos muy transportados, muy refrigerados! ¡Gestión vecinal de los residuos! ¡Consumir lo que se produce en la región! ¡Facilidades a la urbicultura!   
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Miguel Valencia

lunes, 7 de mayo de 2012

Statement of Teotihuacan 2012



STATEMENT OF TEOTIHUACAN, 2012
Toward the Peoples’ Summit in Río de Janeiro
vis-à vis
The United Nations Summit Río+20

Declaración de Teotihuacan, 2012

The Peoples’ Summit, parallel to the United Nations Rio+20 Summit, 20 years after Rio92 – the so-called United Nations Earth Summit-, will take place in Rio de Janeiro from June 15 to 22, 2012.


Meeting in the Sun and the Moon pyramids; in the Teotihuacan great house, a group of Mexican activists from various social groups and organizations concerned with the contempt shown by modern industrial societies for Mother Earth, the ancient cultures and the vernacular world vision that integrate the human being with nature and the universe, we want to share our word with all peoples and nations of the world.

To make economic growth into a dogma provokes the accelerated destruction of the essentials for life on this Earth.

Perennial snows areas, ancient forests, animals, plants and landscapes that marvel us are quickly vanishing; the air that we breath, the water we drink, the food we eat, grow worst everywhere. Seas, rivers, mangroves, jungles, lakes, coral reef are dying. Water tables, fishing areas, springs deplete seriously. Fields are being poisoned by industrialized agricultural & farm business, megaprojects and urban sprawl; cities are becoming hellish places due to automobile traffic and conglomeration. Like cancerous bodies, cities annihilate the countryside and seas situated many kilometers apart from them; they turn into the epicenter of all modern evils. Human conviviality is dying along with the soaring growth of all kind of violence: domestic or intra-family, at school, at work, among communities, states, nations, worldwide.

Horror, tragedy, dwells at almost every corner of the world, in the places where poor people live: all the people devalued in fact by the economy growth and techno-science: indigenous people, peasants, laborers. Violence against Earth’s gifts is identical to that exerted against the oppressed communities, peoples and nations. Environmental disasters go hand in hand with social catastrophes. Peoples’ minds are impoverished every day by the false values introduced since infancy, both by the State and the Market. Schools, television broadcasts and the daily indiscriminate consumption of technologies colonize minds and annihilate peoples’ will. Power, greed, individualism, excess, consumerism, competition, spectacle, speed, exploitation of the human being by the human being, have become supreme values throughout the world.

Banks, multinational corporations, governments, the International Monetary Fund, the World Bank, the United Nations, the media, the schools, colleges and universities conspire in order to boost an economic growth which destroys at great speed Mother Earth’s gifts, the fabric of society and the vernacular cultures, and which benefits solely the 1% who control those businesses and institutions. Banks, markets and economic growth have become so sacred to governments, that they have no qualms about applying radical measures of violence against a society bothered and discontent with the universal catastrophe generated by the economic dogma, both through abusive political publicity saturating the media, and ever-increasing expenditure in the army, paramilitary and law-enforcement forces and in espionage on citizens. Economic growth devastates people’s wealth and results in the extinction of humanity.

Powerful governments, headed by the U.S.A., are preparing a big coup against the Environment and Mother Earth during the United Nations Rio+20 Summit.

In a desperate bid to solve the worldwide economic crisis, powerful governments, led by the United States, prepare a new strike against Mother Earth’s gifts and the Environment during the United Nations Rio+20 Summit, which they have had sequestered since many years ago. Together with Big Banks and multinational corporations, they want an ominous world policy on economics approved. Something like the so called sustainable development introduced in the Earth Summit, Río 1992 that has so gravely undermined Nature. They now have agreed to launch globally the Green Economy scheme presenting it as the major global solution to the environmental and social disasters that we are undergoing; as a perverted response to social demands in favor of a real clean environment and the preservation of Nature’s gifts. They want to open great business opportunities by applying false solutions to these predicaments, aiming, specifically at promoting and legitimating carbon markets, environmental services, biodiversity markets, REDD+ Programs, CDM, Clean Development Mechanisms, among other seedy “environmental” dealings which incorporate the true meaning of the term Green Economy.
The Mexican government, subdued to U.S government and the world’s financial centers rule, has delivered not only our oil, minerals, aquifers, soil and markets to the international pirates; it also participates in the conspiracy to impose the Green Economy.  It is concealing its support to such pirates and to this abominable policy under “a war on drug trafficking and organized crime” –which it neither wants to win nor is able to win- as well as under an extremely costly national media campaign.
The increasing convergence of governments with multinationals’ intentions worsens and deepens another process currently observed, which is the increasing loss of legitimacy or representativeness of both governments and political parties in most nations, who rather than consulting their peoples to resolve ecological, economic and social issues, devote their best efforts to defend the owners of economic power. Too many politics now turn into compulsive thieves, enemies of their peoples and obstacles to the comprehensive solutions to national and international problems.
During the last five years, Mexican government has waged a war against the poor and Mother Earth’s Gifts under the guise of “disciplined” finance and Macro Economy, war on drugs and programs of investments in infrastructure, development and poverty eradication. The outcome of this new war: 10 million people thrown to extreme poverty, thus joining the previous 20 million; 70,000 deaths and 20,000 “disappeared” persons as a result of violence carried to a horrid extreme, as well as a terrible ecological destruction resulting from the abusive extraction of oil, minerals, water and soil, the impacts of new infrastructure, the application of new technologies, and the production and distribution of psychotropic drugs.
The new technologies and megaprojects exacerbate social disruption and contamination, and annihilate the peoples’ natural and cultural treasures.
Techno-science, builds every day the social and ecological catastrophes of our time. Techno-science facilitates and allows the construction and operation of nuclear plants; oil extraction from deep waters, shale and tar sands; open-air extraction of minerals, using great amounts of water, dynamite and cyanide; transgenic crops of trees, corn, soya, cotton; huge cattle runs and breeding stalls; industrialized animal slaughter; the manufacture of weapons, faster motor vehicles, planes and trains; the highly polluting production of food, clothing, housing, buildings, equipment, and instruments harmful for human health; the construction of military bases, dams, water transfers, super highways, freeways, great bridges, ports, tunnels, channels, towers, airports, refineries, landfills, hazardous-waste landfills, tourist developments, industrial cities, and even university cities, hospital cities, entertainment towns, among other megaprojects that over the years imply a exorbitant social and ecological impact.
Driven by universities and scientific research centers, techno-science serves the population’s 1% interests. More than a third of the world’s scientists are engaged in research linked to military aims. The excess of power, loss of moral references, disproportionate greed and the most degrading addictions derange the controllers of Techno-Science. Finance’s cultural misery invades the scientific and technologic world and denigrates art and beauty around the world.

To de-grow serenely rather than de-grow painfully because of the new global policies to boost economic growth; There are efficient ways to face the System’s crisis.

Peoples have always counted with persons, groups and communities who abhor the destruction of forests, jungles, rivers, lakes, wetlands, seas, and the slaughter and debasement of animals, who detest dependency and a bad alienated life, waste and hubris, who oppose to war, oppression and inequality. In millenary cultures there still survive values, customs and techniques that resist the aggressions of the ideology of progress, modernity, development and economic growth. Ancient communities foster self-sufficiency and responsibility. The old age techniques to build roofs, floors, walls, cisterns, latrines, ceramics; to cultivate vegetables, to raise and handle animals, to limit hunt and fishing, to walk great distances and steep hills; for education and the good life, prove most effective in the defense of Nature and by the way, to healthier lifestyles . They promote peace and conviviality among peoples. In Mexico, the Zapatista movement of Chiapas peoples has given to the world one of the most important political initiative to confront cultural, economic and political disaster. Mesoamerican cultures’ vision constitutes a great spiritual wealth of our country given to the world.
For more than fifty years, thousands of groups and millions of persons around the world have studied and experimented with alternatives to industrial technology; they have created ecological techniques to cultivate vegetables and produce food, preserve water and other gifts of Mother Earth, handle residues, build homes, as well as develop health-care, enhance learning and organize ecological communities. These field trials based upon science, together with millenary cultures’ wisdoms, offer efficient ways to confront the present System crisis.
Frugal life, reciprocity, complementarities, solidarity, collaboration, respect towards Mother Earth, all these values that are so present in millennia-old cultures and in some social groups that have emerged during the last centuries, are crucial elements for the resistance to chaotic urbanization and extreme industrialization; to finance, air-conditioned automobiles, consumerism and to the USA lifestyles. Equally, efficient values are the raising of food for family and community consumption, art, festivities and rituals, which halt the spirit of hard competition, egoism, violence and war. Solidarity networks, civil disobedience and occupation of streets and squares are resources that help curb the suffering and horrors produced by the inevitable economic degrowth that societies sentenced to grow will one near day experience; they are resources that allow to degrow in a serene manner and rescue the genuine good life that restores our relations with Mother Earth.
In the face of worldwide environmental and social catastrophe, we call to
-Initiate a process of de-colonization of the social imaginary aimed to eradicate the values imposed on the world by the State and the Market during the last five hundred years; to subvert and reorient the world’s westernization; at turning into heinous practices usury, private accumulation of goods and power, and the radical, irresponsible alteration of Nature. To decolonize the social imaginary, in order to foster a moral regeneration of our societies; to create a new ethics that will introduce in the laws guarantees of respect towards Mother Earth and of protection of society’s most helpless groups. Create a counter-culture that incorporates the best of the past and the present in order to fill with joy our lives and oppose it to the ecocidal, genocidal ideology that rules today’s world.
-Reconceptualize and restructure food production and other basic elements for human survival, including health care, learning and amenities; Regenerate our communities, neighborhoods, quarters, ejidos, towns and cities by means of ecological techniques and practices approved of by all neighbors.
-Strengthen or enhance the autonomy, self-sufficiency and self-management of communities, neighborhoods, quarters, ejidos, towns and borough confederations, and ecological micro-regions (micro-basins or micro watersheds), by means of permanent community assemblies in the public square.
-Set up the bases for a peaceful transition to a society with a low consumption of energy, water and other resources provided by Mother Earth, by means of regional meetings to engage in dialog and reflexive debate, as well as by means of studies and applied research decided by the community.
-Carry out actions in support of local resistances and the worldwide tidal wave of regional revolutions rising from harsh economic conditions imposed by decaying governments. Back the movements of those severely affected by the increasing disorder created by State and Market activities; participate in the Peoples’ summits organized by international networks on environmental and climate justice vis-à-vis official forums like Rio+20; provide support to the revolutions in  production/consumption techniques and practices; in the management of communities, boroughs and cities; accompany both social movements, and urban and peasant revolutions in each ecological or cultural region; endorse the resistance of indigenous populations, fishers, peasants, laborers, workers, migrants, women, unemployed youth, homeless families, landless peasants, and citizens dispossessed or with no degrees or professional qualifications.
-Relocate life and economy, by having most of the community consume what the ecological region produces and produce most what the eco-region consumes. Support the new artisans and the new peasants who adopt, and take advantage of the best from the past and of the present.
April 12, 2012
Translation: María Soledad Cervantes Ramírez; José Arias Chávez; Miguel Valencia Mulkay
Actualización 11/05/2012de firmas de la D de Teotihuacan

Individuals

Adriana Matalonga Rodríguez-Beltrán de ECOMUNIDADES, Red Ecologista Autónoma de la Cuenca de México; Adriana González Celaya de Hermosillo, Sonora; Alejandro Viadaz Loyo; Alejandro Widrobo Castillo; Alfredo Rojas Díaz Duran de Fundación Unidos por la Paz y la Justicia; Altagracia Villarreal Santos, Coalición Rural México, Ecosol México; Amelia Escandón de La Quijota hACe; Ana Valeria Pérez Lemus; Andrea Fernández periodista de Radio Educación UACM; Antonio González M; Arq. Rodolfo Buentello de Sustentápolis; Armando Soto Baeza; Arnold Ricalde de Organi-K; Arturo Zavala Soto; Azael Fernández de Ecopaz; Beatriz Sánchez Solís; Betsabé Piña Morales; Carmen López Campos; Cory Morningstar de Canadians for Action on Climate Change y Wrong Kind of Green; Dulce Karina Fierros Barquera grupo DESCRECIMIENTO UNAM, en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM; Edith Gutiérrez de ECOMUNIDADES, Red Ecologista Autónoma de la Cuenca de México; Edgardo Mota, profesor de la UAM-Xochimilco; Eduardo Correa Senior, profesor de programa de Derechos Humanos de la Universidad Autónoma de la Ciudad de México;Eduardo Farah de la revista Espejo Polanco; Espejo Red; Eduardo Rincón del Programa de Energía de la UACM; Edith Ramírez Ruiz; Elena Nancy Dávila Moreno del Instituto Mexicano de Gobernanza Medioambiental AC; Eloísa Morales Martínez; Esteli García y Eva Luna Marenco Fernández , periodistas de Radio Educación UACM; Enrique González Ruiz. Coordinador del Postgrado en Derechos Humanos de la Universidad Autónoma de la Ciudad de México; Enrique Mendoza Tello de Movimiento Síntesis; Federico Campbell Peña, periodista; Fernando Magaña Velázquez; Francisco Palop Jonqueres, profesor de la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad de Valencia, España; Gabriel Eduardo Gallegos Labastida del grupo DESCRECIMIENTO UNAM, en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM; Gustavo Mino Pérez; Hilda Valdez Piulh; Hilda Venegas Negrete, Abogada perito, Defensora de DH, Unión de Juristas de México; Hugo Aboites, profesor-investigador, UAM-X; Humberto Ángel Torres de Desarrollo Integral Autogestionario AC; Horacio Almanza Alcalde, científico; Horst & Magdalena Steinmeyer, Miembros de la ALIANZA de la Costa Verde; Isaac Zabisky, atleta olímpico cubano; Iván Jaime Uranga Favela; Ivette Lacaba del Kolektivo Azul; Jaquelina Gómez García de AFS Ciudadanos del Mundo A.C; Jesús Castillo Marroquin, profesor de la maestría en educación ambiental de la Universidad Autónoma de la Ciudad de México; Jesús Alejandro Ramírez Funes, Movimiento de Cristianos Comprometidos, Fundación Unidos por la Paz y la Justicia; Josefina Mena Abraham del Grupo de Tecnología Alternativa SC; José Ignacio Félix Díaz del Cuerpo Académico de "Diseño Ambiental" de la División de Ciencias de la Comunicación y Diseño de la UAM- Cuajimalpa; José Luis Pérez Trujillo;  Jovita Prado Villafaña, ecologista; José Arias Chávez del Pacto de Grupos Ecologistas , del Comité de Defensa de Michoacán y de la Asociación de Tecnología Apropiada AC ; José Fernández, Jefe de Información Honorario de la Organización Periodística Independiente Denuncie Sin Miedo; José Manuel Cadena; José Rustrián Paoletti; Julia Maitret de la Vegetarian Society of El Paso" Texas, USA; Julieta Dávila P; J. Carlos Amaro Partida; Laura Nava de Brújula Metropolitana; Leonel Alberto Guitian Berniser; Leticia Rubello del Grupo Ecologista El Mayab AC; Ligia Noemí Aguilar Salazar; Liliana Fort de la UACM; Lucila Torres Solano del Klimaforum10Puebla; Lucrecia Noemí Mazadiego Rojas de Econcienciarte y Por una Tierra Viva; Luis Daniel Ávila de Bartola Axayácatl, AC; Luis Miranda Resendiz, Integrante de la Dirección Política del PPS de México; Lysete S Hernández, CSERGE, University of East Anglia, UK; Mara Cabrejas Hernansanz, Profesora de sociología en la Universitat de València (España); Marcelo Herrera Herbert; María Esmeralda Vázquez Osorno; María Magdalena López Olvera; María Soledad Cervantes Ramírez; Marisol Martínez Cortes; Mario Rechy Montiel de la Cooperativa México Profundo; Martha Velázquez Keller, ciclista; Mauricio Bernárdez M de la Red Planetaria; Ing. Mauricio Ortiz Bordes y Mercedes López de Vía Orgánica AC; Margarita Hernández Ruiz de La Quijota hACe; Miguel Valencia Mulkay de ECOMUNIDADES, Red Ecologista Autónoma de la Cuenca de México; Mónica Pratz, ambientalista; Norma de NSG Herrejón Sada, miembro de la Cooperativa Tierra Nueva Liberada; Olsa L. Sánchez; Omar Gibran Flores de AFS Ciudadanos del Mundo A.C; Oscar Raúl Guzmán Rivera;  O Susana Cabir M.; Patricia Ruiz Anchondo, Presidenta de Mujeres en Lucha por la Democracia, A.P.N. ; Rafael Huacuz, urbanista; Ramón Ojeda Mestre, ambientalista; Raquel Rodríguez; Rosa María López Lugo; Rubén Almeida de Casa Ecológica de Teotihuacán;  Ronnie Cummins y Rosemary Welch de Vía Orgánica AC; Teresita Hernández Ruiz de La Quijota hACe; Virginia Piña Morales; Salvador Sánchez S ;Samuel Brugger Jakob del Instituto Mexicano de Gobernanza Medioambiental AC; Sócrates Silverio Galicia del Movimiento Democracia Directa.
Organizations:
Asociación de Tecnología Apropiada AC; AFS Ciudadanos del Mundo A.C; Canadians for Action on Climate Change; Casa Ecológica de Teotihuacán AC; Ciudadanos Organizados por la Transparencia AC; Comisión Coordinadora del Movimiento de Transformación Social, MTS; Comité de Defensa de Michoacán; ECOMUNIDADES, Red Ecologista Autónoma de la Cuenca de México; Cooperativa México Profundo ; Espejo Polanco-Espejo Red; Cuerpo Académico de "Diseño Ambiental" de la División de Ciencias de la Comunicación y Diseño de la UAM- Cuajimalpa; Fundación Unidos por la Paz y la Justicia; Desarrollo Integral Autogestionario AC; Grupo Ambientalista "Descubridora", El Oro, Estado de México; Grupo Ecologista del Mayab, A.C.; grupo de DESCRECIMIENTO, UNAM; Grupo de Tecnología Alternativa SC; La Quijota hACe; Klimaforum10, Puebla; Kolectivo El Rebelde, Mérida, Yucatán, México; Movimiento Democracia Directa; Movimiento de Cristianos Comprometidos; Movimiento Síntesis; Organi-K; Instituto Mexicano de Gobernanza Medioambiental AC; Red en Defensa de la Ciudad de México; Vía Orgánica AC; Wrong Kind of Green.

jueves, 26 de abril de 2012

Declaración de Teotihuacan



DECLARACION DE TEOTIHUACAN, 2012


Hacia la Cumbre de los Pueblos de Río de Janeiro, frente a la cumbre Río+20 de las Naciones Unidas.

La Cumbre de los Pueblos, paralela a la Cumbre Río+20 de las Naciones Unidas, a 20 años de Río92-Cumbre de la Tierra de las Naciones Unidas, tendrá lugar en Río de Janeiro, entre el 15 y el 22 de junio de 2012.

Desde los templos del Sol y la Luna, de la casa grande de Teotihuacán, reunidos un grupo de mexicanos preocupados por el desprecio de las sociedades industriales modernas hacia nuestra Madre Tierra y por las visiones vernáculas del mundo que integran al hombre con la naturaleza y el universo, queremos compartir nuestra palabra con todos los pueblos y naciones del mundo.

Convertir el crecimiento económico en un dogma destruye aceleradamente los fundamentos de la vida en la Tierra.

Desaparecen rápidamente las nieves perpetuas, los bosques antiguos, los animales que nos encantan; empeora por doquier el aire que respiramos, el agua que bebemos, los alimentos que comemos. Mueren los mares, los ríos, las selvas, los lagos, los arrecifes coralinos; se agotan los mantos freáticos, las pesquerías, los manantiales; el campo se envenena por la actividad agropecuaria industrializada, los megaproyectos y la urbanización dispersa; las ciudades se vuelven infernales por el uso del automóvil y la gran conglomeración; como cuerpos cancerosos, las ciudades aniquilan los campos y los mares a muchos kilómetros de distancia de ellas; se convierten en el centro de origen de todos los males modernos. Se acaba la convivencia humana y se disparan todas las violencias: intrafamiliar, escolar, laboral, inter comunitaria, internacional, mundial.

El horror, la tragedia se instalan en todos los rincones del mundo, allí donde viven los indígenas, los campesinos, los trabajadores, los pobres, los desvalorizados por la economía y la Tecnociencia, por el embate del crecimiento económico. La violencia contra los dones de la Madre Tierra es la misma que se ejerce contra las comunidades, los pueblos y las naciones oprimidas. Las catástrofes ambientales corren en el mundo juntas con las catástrofes sociales. Las mentes de los pueblos se empobrecen por los valores introducidos desde la primera infancia por el Estado y el Mercado. Las escuelas, las televisoras y el consumo cotidiano de tecnologías, colonizan las mentes y aniquilan las voluntades. Se imponen en el mundo como valores supremos: el poder, la codicia, el individualismo, la desmesura, el consumismo, la competencia, el espectáculo, la velocidad, la explotación del ser humano por el ser humano.

Los bancos, las empresas transnacionales, los gobiernos, el Fondo Monetario Internacional, el Banco Mundial, las Naciones Unidas, los medios, las escuelas y universidades, se confabulan para impulsar un crecimiento económico que destruye aceleradamente los dones de la Madre Tierra, el tejido social y las culturas vernáculas, y que sólo beneficia al 1% que controla a estas empresas e instituciones. Los bancos, los mercados, el crecimiento económico, se han vuelto tan sagrados para los gobiernos que éstos no dudan en aplicar radicales medidas de violencia contra la sociedad inconforme con el desastre mundial generado por el dogma económico, tanto por medio de la abusiva publicidad política que satura los medios, como por medio de crecientes gastos en cuerpos militares, paramilitares, policiacos y de espionaje de ciudadanos.  El crecimiento económico oprime a la humanidad y la lleva a su extinción.

Los gobiernos poderosos, con EUA a la cabeza, preparan un gran golpe contra el Medio Ambiente y los dones de la Madre Tierra en la Cumbre Río+20 de las Naciones Unidas.

Desesperados por la gravedad de la crisis económica mundial, los gobiernos poderosos, con EUA a la cabeza, preparan un nuevo golpe contra los dones de la Madre Tierra y el Medio Ambiente en la Cumbre Río+20 de las Naciones Unidas, organización a la que tienen secuestrada desde hace muchos años; preparan, junto con los grandes bancos y las multinacionales, el lanzamiento mundial de una ominosa política, similar al desarrollo sustentable introducido en la Cumbre de la Tierra del 92 que tanto daño ha causado a los dones de la Madre Tierra. Han acordado introducir la Economía Verde, como gran solución mundial a las catástrofes ambientales y sociales que padecemos; como pervertida respuesta a las demandas sociales a favor de un ambiente limpio y la conservación de los dones de la Madre Tierra. Quieren abrir grandes oportunidades de negocios, con la aplicación de falsas soluciones en la conservación de los dones de la Madre Tierra y en la mejoría del Medio Ambiente; concretamente, quieren promover y legitimar los mercados de carbono, de servicios ambientales, de biodiversidad, los programas REDD+, los Mecanismos de Desarrollo Limpio, entre otros turbios negocios ambientales que constituyen el verdadero significado de la Economía Verde.

El gobierno mexicano, supeditado a las consignas de EUA y de los grandes financieros mundiales, no sólo ha entregado el petróleo, los minerales, los acuíferos, los suelos y los mercados de los mexicanos a los piratas internacionales, también participa en el consenso gubernamental que quiere imponer la Economía Verde; ha encubierto su apoyo a los piratas internacionales y a la Economía Verde, por medio de una “guerra contra el narcotráfico y el crimen organizado” -que no quiere ni puede ganar- y una muy costosa campaña mediática nacional.

La creciente convergencia de los gobiernos con las empresas multinacionales agrava y profundiza otro proceso que se observa en la actualidad: la creciente pérdida de legitimidad o representatividad de los gobiernos y partidos políticos en la mayoría de los países del mundo, quienes en lugar de consultar a los pueblos para resolver los problemas ecológicos, económicos y sociales, dedican sus mejores empeños a defender a los dueños del poder económico; demasiados políticos se convierten ahora en ladrones compulsivos, en enemigos de sus pueblos y en obstáculos que impiden las soluciones de fondo de las problemáticas nacionales e internacionales.

En México, se ha librado en los últimos cinco años una guerra contra los pobres y los dones de la Madre Tierra, disfrazada de finanza y macro economía “disciplinada”, de combate al narcotráfico y de programa de inversión en infraestructura, desarrollo y combate a la pobreza. El saldo de esta nueva guerra: 10 millones de personas lanzadas a la miseria extrema -que se unen a los 20 millones previamente existentes; 70,000 muertos y 20,000 desaparecidos, causados por la violencia extrema, y una terrible destrucción ambiental causada tanto por la extracción abusiva de petróleo, minerales, agua y tierras, la construcción de la nueva infraestructura, la utilización de nuevas tecnologías, así como por la producción y distribución de enervantes.

Las nuevas tecnologías y los megaproyectos agravan el desquiciamiento social y las contaminaciones y aniquilan las riquezas naturales y culturales de los pueblos.

Las catástrofes sociales y ecológicas se construyen diariamente por medio de la Tecnociencia que propicia y facilita la construcción y operación de centrales nucleares, la extracción de petróleos en aguas profundas, en arenas bituminosas, en esquistos o pizarras(shale); la extracción de minerales a cielo abierto, con grandes cantidades de agua, dinamita y cianuro; las plantaciones transgénicas de árboles, maíz, soya, algodón; los grandes potreros y establos; la matanza industrializada de animales; la fabricación de armas, autos, aviones, trenes rápidos; la producción de alimentos, vestimentas, viviendas, edificaciones, equipos, instrumentos que dañan la salud humana y contaminan el medio ambiente;  la construcción de bases militares, presas, trasvases, súper carreteras, vías rápidas, grandes puentes, puertos, túneles, canales, torres, aeropuertos, refinerías, rellenos sanitarios, confinamientos de residuos peligrosos, desarrollos turísticos, ciudades industriales, universitarias, hospitalarias, de diversión, entre otros megaproyectos que al correr de los años implican un excesivo impacto social y ambiental.

Impulsada por universidades y centros de investigación científica y de altos estudios, la Tecnociencia sirve a los intereses del 1% de la población. Más de una tercera parte de los científicos del mundo se ocupa de investigaciones ligadas a fines militares. Quienes controlan la Tecnociencia, están perturbados por el exceso de poder, la pérdida de referentes, la desmesura y las adicciones más degradantes. La miseria cultural de las finanzas invade al mundo científico y tecnológico y degrada el arte y la belleza en el mundo.

Descrecer serenamente en lugar de decrecer dolorosamente, a causa de las nuevas políticas mundiales para impulsar el crecimiento económico: Hay formas eficaces para enfrentar la crisis del Sistema.

Desde siempre, los pueblos han contado con personas, grupos y comunidades que aborrecen la destrucción de los bosques, las selvas, los ríos, los lagos, los humedales, los mares, y la matanza y envilecimiento de los animales; que detestan la dependencia y la mala vida, el despilfarro y la arrogancia; que abominan la guerra, la opresión, la desigualdad. En las culturas milenarias todavía subsisten valores, costumbres y técnicas que resisten los embates de la ideología del progreso, del desarrollo y del crecimiento económico. Las comunidades antiguas fomentan la autonomía y la responsabilidad. Las antiguas técnicas para la construcción de techos, pisos, muros, aljibes, letrinas, cerámicas; para el cultivo de hortalizas, la cría y cuidado de los animales; para la caza y la pesca; para caminar largos trechos y empinados cerros; para la educación y la buena vida; resultan muy eficaces en la defensa de los dones de la Madre Tierra; fomentan la paz y la convivencia de los pueblos. En México, el movimiento zapatista de los pueblos de Chiapas ha dado al mundo una de las iniciativas políticas más importantes para hacer frente al desastre cultural, económico y político. La visión de las culturas mesoamericanas constituye un gran acervo espiritual de nuestro país.

Desde hace más de medio siglo, miles de grupos y millones de personas en el mundo han estudiado y experimentado alternativas a la tecnología industrial: han creado ecotecnias, para el cultivo de verduras, la producción de alimentos, la conservación del agua y otros dones de la Madre Tierra, el manejo de residuos, a construcción de viviendas, así como el cuidado de la salud, el aprendizaje, la organización de comunidades ecológicas. Estos ensayos con base en la ciencia, unidos a los conocimientos de las culturas milenarias ofrecen formas eficaces de enfrentar la crisis del Sistema.

La vida frugal, la reciprocidad, la complementariedad, la solidaridad, la cooperación, el respeto por los dones de la Madre Tierra, valores tan presentes en culturas milenarias y en algunos grupos sociales que han emergido en los últimos siglos, son elementos centrales en la resistencia frente a la urbanización e industrialización salvajes; frente a la finanza, el auto climatizado, la vida de consumo y el modo de vida de los estadunidenses. También lo son: el cultivo de alimentos para el consumo de la familia o la comunidad, el arte, las fiestas y rituales que contienen el espíritu competitivo, la violencia y la guerra; las redes de solidaridad, la desobediencia civil y la ocupación de las calles y plazas, son recursos que nos ayudan a frenar los sufrimientos y horrores producidos por el inevitable decrecimiento económico que sufren las sociedades condenadas al crecimiento; son medios que nos permiten descrecer serenamente y rescatar la buena vida que restaura nuestras relaciones con la Madre Tierra.

Frente a la catástrofe ambiental y social mundial convocamos a:

-Iniciar un proceso de descolonización del imaginario social que elimine los valores que el Estado y el Mercado le han impuesto al mundo en los últimos quinientos años; que subvierta y reoriente la occidentalización del mundo; que vuelva abominable la usura, la acumulación privada de bienes y poder, la alteración radical, irresponsable, de los dones de la Madre Tierra. Descolonizar el imaginario social, para impulsar una regeneración moral de nuestras sociedades; para crear una nueva ética que introduzca en las leyes garantías de respeto por los dones de la Madre Tierra y de protección de los grupos o sectores más vulnerables de la sociedad. Crear una contra-cultura que integre lo mejor del pasado y del presente para oponerla a la cultura ecocida y genocida, dominante en el mundo de hoy.

-Reconceptualizar y reestructurar la producción de alimentos y otros elementos básicos para la subsistencia humana, incluyendo la salud, el aprendizaje y las amenidades; regenerar nuestras comunidades, barrios, colonias, ejidos, pueblos y ciudades, por medio de ecotecnias y prácticas aprobadas por los vecinos.

-Fortalecer la autonomía y la autogestión de las comunidades, barrios, colonias, ejidos y pueblos y las confederaciones de municipios y micro regiones ecológicas (micro cuencas), por medio de asambleas vecinales permanentes en la plaza pública.

-Establecer las bases de una transición pacífica hacia una sociedad con bajo consumo de energía, agua y otros dones de la Madre Tierra, por medio de reuniones o encuentros regionales de diálogo y reflexión; por medio del estudio y la investigación aplicada.

-Realizar acciones en apoyo a las resistencias locales y a la ola mundial de revoluciones regionales nacidas de las muy duras condiciones económicas impuestas por gobiernos en descomposición. Apoyar los movimientos de los afectados severamente por los crecientes desordenes del Estado y del Mercado; participar en las cumbres de los pueblos organizadas por las redes mundiales de justicia ambiental y climática frente a los foros oficiales, como Río+20; dar sostén a las revoluciones en las técnicas o prácticas de producción y consumo, en las formas de gestionar las comunidades, los municipios y las ciudades: acompañar a los movimientos sociales, a las revoluciones urbanas y campesinas, en cada región ecológica o cultural; respaldar las resistencias de indígenas, pescadores, campesinos, trabajadores, migrantes, mujeres, jóvenes sin empleo, familias sin techo, campesinos sin tierra, ciudadanos sin títulos, sin certificaciones.

-Relocalizar la vida y la economía: producir lo que se consume y consumir lo que se produce en la región ecológica donde se habita; apoyar al neo artesano y al neo campesino que adoptan lo mejor del pasado y del presente.

12 de abril de 2012




Actualización 11/05/2012de firmas de la D de Teotihuacan

Individuals

Adriana Matalonga Rodríguez-Beltrán de ECOMUNIDADES, Red Ecologista Autónoma de la Cuenca de México; Adriana González Celaya de Hermosillo, Sonora; Alejandro Viadaz Loyo; Alejandro Widrobo Castillo; Alfredo Rojas Díaz Duran de Fundación Unidos por la Paz y la Justicia; Altagracia Villarreal Santos, Coalición Rural México, Ecosol México; Amelia Escandón de La Quijota hACe; Ana Valeria Pérez Lemus; Andrea Fernández periodista de Radio Educación UACM; Antonio González M; Arq. Rodolfo Buentello de Sustentápolis; Armando Soto Baeza; Arnold Ricalde de Organi-K; Arturo Zavala Soto; Azael Fernández de Ecopaz; Beatriz Sánchez Solís; Betsabé Piña Morales; Carmen López Campos; Cory Morningstar de Canadians for Action on Climate Change y Wrong Kind of Green; Dulce Karina Fierros Barquera grupo DESCRECIMIENTO UNAM, en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM; Edith Gutiérrez de ECOMUNIDADES, Red Ecologista Autónoma de la Cuenca de México; Edgardo Mota, profesor de la UAM-Xochimilco; Eduardo Correa Senior, profesor de programa de Derechos Humanos de la Universidad Autónoma de la Ciudad de México;Eduardo Farah de la revista Espejo Polanco; Espejo Red; Eduardo Rincón del Programa de Energía de la UACM; Edith Ramírez Ruiz; Elena Nancy Dávila Moreno del Instituto Mexicano de Gobernanza Medioambiental AC; Eloísa Morales Martínez; Esteli García y Eva Luna Marenco Fernández , periodistas de Radio Educación UACM; Enrique González Ruiz. Coordinador del Postgrado en Derechos Humanos de la Universidad Autónoma de la Ciudad de México; Enrique Mendoza Tello de Movimiento Síntesis; Federico Campbell Peña, periodista; Fernando Magaña Velázquez; Francisco Palop Jonqueres, profesor de la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad de Valencia, España; Gabriel Eduardo Gallegos Labastida del grupo DESCRECIMIENTO UNAM, en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM; Gustavo Mino Pérez; Hilda Valdez Piulh; Hilda Venegas Negrete, Abogada perito, Defensora de DH, Unión de Juristas de México; Hugo Aboites, profesor-investigador, UAM-X; Humberto Ángel Torres de Desarrollo Integral Autogestionario AC; Horacio Almanza Alcalde, científico; Horst & Magdalena Steinmeyer, Miembros de la ALIANZA de la Costa Verde; Isaac Zabisky, atleta olímpico cubano; Iván Jaime Uranga Favela; Ivette Lacaba del Kolektivo Azul; Jaquelina Gómez García de AFS Ciudadanos del Mundo A.C; Jesús Castillo Marroquin, profesor de la maestría en educación ambiental de la Universidad Autónoma de la Ciudad de México; Jesús Alejandro Ramírez Funes, Movimiento de Cristianos Comprometidos, Fundación Unidos por la Paz y la Justicia; Josefina Mena Abraham del Grupo de Tecnología Alternativa SC; José Ignacio Félix Díaz del Cuerpo Académico de "Diseño Ambiental" de la División de Ciencias de la Comunicación y Diseño de la UAM- Cuajimalpa; José Luis Pérez Trujillo;  Jovita Prado Villafaña, ecologista; José Arias Chávez del Pacto de Grupos Ecologistas , del Comité de Defensa de Michoacán y de la Asociación de Tecnología Apropiada AC ; José Fernández, Jefe de Información Honorario de la Organización Periodística Independiente Denuncie Sin Miedo; José Manuel Cadena; José Rustrián Paoletti; Julia Maitret de la Vegetarian Society of El Paso" Texas, USA; Julieta Dávila P; J. Carlos Amaro Partida; Laura Nava de Brújula Metropolitana; Leonel Alberto Guitian Berniser; Leticia Rubello del Grupo Ecologista El Mayab AC; Ligia Noemí Aguilar Salazar; Liliana Fort de la UACM; Lucila Torres Solano del Klimaforum10Puebla; Lucrecia Noemí Mazadiego Rojas de Econcienciarte y Por una Tierra Viva; Luis Daniel Ávila de Bartola Axayácatl, AC; Luis Miranda Resendiz, Integrante de la Dirección Política del PPS de México; Lysete S Hernández, CSERGE, University of East Anglia, UK; Mara Cabrejas Hernansanz, Profesora de sociología en la Universitat de València (España); Marcelo Herrera Herbert; María Esmeralda Vázquez Osorno; María Magdalena López Olvera; María Soledad Cervantes Ramírez; Marisol Martínez Cortes; Mario Rechy Montiel de la Cooperativa México Profundo; Martha Velázquez Keller, ciclista; Mauricio Bernárdez M de la Red Planetaria; Ing. Mauricio Ortiz Bordes y Mercedes López de Vía Orgánica AC; Margarita Hernández Ruiz de La Quijota hACe; Miguel Valencia Mulkay de ECOMUNIDADES, Red Ecologista Autónoma de la Cuenca de México; Mónica Pratz, ambientalista; Norma de NSG Herrejón Sada, miembro de la Cooperativa Tierra Nueva Liberada; Olsa L. Sánchez; Omar Gibran Flores de AFS Ciudadanos del Mundo A.C; Oscar Raúl Guzmán Rivera;  O Susana Cabir M.; Patricia Ruiz Anchondo, Presidenta de Mujeres en Lucha por la Democracia, A.P.N. ; Rafael Huacuz, urbanista; Ramón Ojeda Mestre, ambientalista; Raquel Rodríguez; Rosa María López Lugo; Rubén Almeida de Casa Ecológica de Teotihuacán;  Ronnie Cummins y Rosemary Welch de Vía Orgánica AC; Teresita Hernández Ruiz de La Quijota hACe; Virginia Piña Morales; Salvador Sánchez S ;Samuel Brugger Jakob del Instituto Mexicano de Gobernanza Medioambiental AC; Sócrates Silverio Galicia del Movimiento Democracia Directa.

Organizations:
Asociación de Tecnología Apropiada AC; AFS Ciudadanos del Mundo A.C; Canadians for Action on Climate Change; Casa Ecológica de Teotihuacán AC; Ciudadanos Organizados por la Transparencia AC; Comisión Coordinadora del Movimiento de Transformación Social, MTS; Comité de Defensa de Michoacán; ECOMUNIDADES, Red Ecologista Autónoma de la Cuenca de México; Cooperativa México Profundo ; Espejo Polanco-Espejo Red; Cuerpo Académico de "Diseño Ambiental" de la División de Ciencias de la Comunicación y Diseño de la UAM- Cuajimalpa; Fundación Unidos por la Paz y la Justicia; Desarrollo Integral Autogestionario AC; Grupo Ambientalista "Descubridora", El Oro, Estado de México; Grupo Ecologista del Mayab, A.C.; grupo de DESCRECIMIENTO, UNAM; Grupo de Tecnología Alternativa SC; La Quijota hACe; Klimaforum10, Puebla; Kolectivo El Rebelde, Mérida, Yucatán, México; Movimiento Democracia Directa; Movimiento de Cristianos Comprometidos; Movimiento Síntesis; Organi-K; Instituto Mexicano de Gobernanza Medioambiental AC; Red en Defensa de la Ciudad de México; Vía Orgánica AC; Wrong Kind of Green.