Ebrard miente cuando afirma que se ocupa de adaptar a la ciudad de México frente a los efectos del cambio climático: inundaciones, sequias, incendios forestales, etc y mitigar el desastre climático, pues, la Línea 12 del Metro implica provocar un gran aumento en el consumo de gasolina y electricidad, lo que implica un gran aumento en la producción de gases de efecto invernadero GEI, causantes del desastre climático, debido al gran aumento en las distancias y tiempos de transporte diarios de las decenas de miles de personas que dejarán sus viviendas en las delegaciones centrales de la ciudad para irse a vivir a Tlahuac, Milpalta, Chalco, Tenanago, Temamatla, Cocotitlan y otros municipios del estado de México e inclusive de Morelos, en los proximos años.
La línea 12 del Metro provocará un enorme crecimiento de la mancha urbana de la ciudad de México y elevará los tiempos diarios promedio de transporte en esta ciudad. Un desastre urbano este megaproyecto que engaña a muchos científicos y academicos, favorables a esta línea (ese es el gran problema: el apoyo de las universidades y los partidos a este proyecto)
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Miguel Valencia
Ecomunidades
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